Cuando acudes a un tablao flamenco en Sevilla conoces gran cantidad de palos que lo componen. Las alegrías es uno de los más fiesteros, siendo también de los más antiguos. Comenzó en Cádiz, siendo considerado uno de los palos más importantes de este género tradicional.
Su baile también es uno de los más antiguos, siendo una fusión entre diferentes estilos como pueden ser los panaderos, las coplas romanceadas, las seguiriyas o las rosas. Uno de los rasgos más distintivos es su compás, dado que lo comparte con la soleá.
Aunque debemos destacar que la base de las alegrías son las jotas. Este género llegó a Cádiz durante la invasión francesa, por lo que no es raro que en muchas de sus letras primeras se hiciera alusión al río Ebro y Navarra. Aquí surge la gaditana, un estilo que ha ido evolucionando hasta convertirse en las alegrías que conocemos actualmente.
A su vez, el baile flamenco resulta tener una gran tradición, sirviendo de referencia para otros palos del flamenco que comenzaron a formar sus propias coreografías. Es uno de los bailes flamencos más antiguos y a la vez atractivos.
En el ámbito del baile destaca Juana Vargas, más conocida como La Macarrona. A la voz, Sebastián El Pena, quien define la forma de cantar como jaleo en 1909. Sin embargo, cabe hacer hincapié en la guitarra de la mano de Paco de Lucía, quien cambió por completo el género al interpretar La Barrosa en su disco Siroco de 1986.
Acudir a un tablado flamenco en Sevilla te permite conocer más de cerca este palo del flamenco. Así como también poder disfrutar en directo de los mejores profesionales del sector, con todo el arte y la belleza que desprenden sus actuaciones.
No dudes en vivir la experiencia de poder disfrutar de un tablao flamenco.
